El tenista sudamericano en general es uno de los más luchadores del circuito. Viaja kilómetros y kilómetros para poder llegar a cumplir sus objetivos o por lo menos intentarlo. Hablamos con Hans Podlipnik Castillo donde nos contó sobre su carrera, objetivos, fundación, anécdotas y la serie que se viene entre Argentina vs Chile por la Copa Davis en San Juan.
¿Por qué el tenis y no otro deporte? Más que nada sabiendo que venís de una familia que ha practicado fútbol y esquí.
Mis padres jugaban ocasionalmente cuando yo era pequeño, mi padre austriaco fue futbolista y esquiador así que el deporte ha estado desde siempre muy dentro de la familia. En Chile, y en el resto de Sudamérica, es mucho más fácil practicar tenis o fútbol que esquí. Ser esquiador acá es muy caro y casi ninguna familia lo podría financiar. Mi padre me llevó por el camino del deporte toda mi vida, nos llevaba a toda la familia todos los fines de semana a hacer alguna excursión a las montañas, a jugar fútbol, o al parque, eso es algo por lo cual le estaré eternamente agradecido.
Hoy en día es muy difícil llevar una carrera sobre todo para el tenista sudamericano. ¿Cómo hiciste para “bancarte”, económicamente y poder viajar para jugar torneos?
La verdad es que siendo sudamericano es muy difícil llegar a ser tenista profesional, no es casualidad que la mayoría de los top cien sean casi todos europeos o de países desarrollados. Lo que ha logrado con el tenis la Argentina es elogiable y creo que se debe en parte en que tienen un sistema competitivo excelente además de una cultura deportiva avanzada.
Al salir de juveniles y no tener un auspiciador tuve que tomar una decisión que no fue fácil: o hacía el camino simple y me iba a estudiar alguna carrera en alguna universidad, o me comprometía 100% a mi sueño e intentaba dedicarme profesionalmente al tenis. No tenía a nadie a quien pedirle dinero así que para “bancarme” económicamente usé la única herramienta que tenía en esos momentos. Le escribí a más de 300 clubes en toda Europa para ver si me contrataban para la temporada de Interclubes. De los 300 clubes, poquísimos contestaron pero dos o tres me ofrecieron algo para esa temporada y al final solo con uno pude concretar y fue mi salvavidas. Me fui con lo que tenía a Europa a jugar unos torneos previos a mi primer Interclub esperando no lesionarme en cada partido para poder llegar sano a jugar por un club y poder cobrar algo para seguir financiándome los viajes. Así pasé muchos años antes de poder llegar a tener cierta estabilidad económica. Años más tarde terminé jugando en más de siete países e incluso algunas veces me tocaba jugar un día viernes en un país, sábado en otro país y domingo en otro. Un ejemplo de eso fue cuando jugaba en Austria, Luxemburgo, y Alemania en tres días, y tuve que jugar de día y manejar en las noches para poder llegar al siguiente encuentro; en ese fin de semana manejé más de 2500 kilómetros sin ayuda jugando de día y manejando en las noches. Entendía dentro de mí que en ese momento era la única manera de seguir cumpliendo mis sueños.
Una vez escuchamos la historia de un tenista que contaba que se fue a jugar a Europa para poder juntar dinero y poder financiar parte de su carrera. Ha vivido en pensiones horrorosas hasta con su novia y han tenido que pasar la noche durmiendo en la estación de tren para poder ahorrar unos pesos. ¿Qué situación has pasado en tu caso para poder seguir viviendo tu sueño?
En los torneos más bajos me pasaron muchas historias increíbles, historias que en su mayoría uno jamás se imaginaría que le tocarían vivir. Estando una vez en Benín City en Nigeria nos tocó jugar con 47 grados de calor a la sombra, y en un club público donde la gente se comportaba de manera muy agresiva contra los extranjeros que jugaban contra los nigerianos. Un día en pleno partido llegó una turba de más de 200 personas que tomó las canchas y a un tenista amateur nigeriano se lo llevó a una habitación dentro del club y lo golpeó bastante tiempo, fue muy triste. El día siguiente intentaron secuestrar al supervisor del torneo a punta de metralletas. A pesar de estas cosas, me llevo uno de los recuerdos más lindos de mi vida, de haber tenido la oportunidad de conocer gente que con muy poco es extremadamente feliz pero que al mismo tiempo la corrupción del país y la falta de educación crea grupos violentos.
En mi carrera me ha tocado dormir en muchos lugares feos, pero lo veo como algo muy importante en la formación de la persona la cual soy hoy en día. He tenido la fortuna de vivir en los dos extremos, vivir en hoteles de cinco estrellas, y vivir en hostales para poder jugar torneos, creo que muy poca gente puede experimentar estos contrastes como forma de vida, y personalmente creo que me ha abierto mucho mi mentalidad y la manera de ver la vida. Lo que se vive en Túnez y en otros países es una pena, y es una pena que la ITF no haga nada por detener esas prácticas. A mí también me tocó vivirlo en Egipto, donde encontramos una cancha destrozada en nuestro hotel, pero le pedimos permiso a la gerencia para arreglarla porque si no teníamos que pagar las canchas oficiales. Después de muchos días de trabajar la cancha la hicimos jugable y terminamos entrenando ahí.
A muchos tenistas se les hace muy duro poder seguir con su carrera no solo por lo económico sino también por lo mental. ¿Alguna vez se te cruzó por la cabeza dejar el tenis?
Hubo muchos momentos en los que se me cruzó por la cabeza dejar el tenis, sobre todo cuando uno viene de una racha de malos resultados, es en esos momentos cuando los fantasmas aparecen con más fuerza y se necesita mucha fortaleza mental para poder mantenerse firme sobre todo cuando uno lleva muchos meses solo en el extranjero.
El tenis chileno es un tema, la Federación no hizo las cosas bien y actualmente no tienen tantos tenistas como se quisiera. ¿Por qué pensás que fue y que se podría hacer para mejorarlo?
Creo que la Federación de Tenis de Chile ha pasado por lo que pasan todos los gobiernos y federaciones en toda Latinoamérica. Tuvimos un momento de gloria donde hubo muchos recursos y lamentablemente estos atrajeron a gente que no le interesaba el desarrollo del tenis sino más bien sus propios intereses personales. Las personas que tuvieron el poder federativo por muchos años en Chile destruyeron completamente el tenis, se perdieron millones de dólares destinados al desarrollo y masificación del deporte y es un daño que nos va a costar muchos años para poder arreglarlo. Lo más importante que podemos hacer ahora como tenis chileno, es encontrar gente honrada y que tenga el tiempo para dedicarse 100% a un trabajo dirigencial y federativo, ese es un primer gran paso para ordenar nuestra casa por dentro, no podemos pedir mucho más que eso en este momento.
El año que viene serán los Juegos Panamericanos y en el 2020 se vienen los Juegos Olímpicos en Tokyio. ¿Uno de los objetivos es clasificar para ambos? ¿Qué recuerdos tenés de la medalla de Oro en Toronto?
Para mí ganar una medalla de Oro en los Juegos Panamericanos fue uno de los logros más lindos de mi carrera, estoy muy entusiasmado de jugarlos el próximo año. Los JJ.OO. son obviamente lo máximo al menos para mí, al ser una competencia que se juega cada cuatro años solamente son pocas las oportunidades que un atleta tiene para competir bien ahí.
Este año ganaste tu primer título ATP en dobles junto a Nicolás Jarry. ¿Qué recuerdos tenés y cómo se sintieron durante toda la semana?
Con Nico somos grandes amigos y siempre hemos tenido una gran química dentro de la cancha, los dos nos entendemos muy bien y creo que formamos un equipo muy peligroso. En el ATP de Quito tuvimos una semana muy linda donde jugamos todos los partidos con mucha confianza y nos sentimos jugando a un muy buen nivel.
Te metiste por primera vez en el Top 50 ATP en dobles. ¿Cuáles son tus sensaciones? ¿Cuál será tu nuevo objetivo?
Siento que he llegado a lugares que hace muchos años atrás jamás me hubiera imaginado, estoy disfrutando cada momento de mi carrera. Mi nuevo objetivo es el Top 30 y ganar más títulos.
Hace muy poco estuviste participando de la serie de Copa Davis ante Ecuador, ahora toca la Argentina. ¿Cómo ves la serie en cuanto a la superficie y altura? ¿Creés que habrá un duelo (para bien) de hinchadas? ¿Cómo pensás que se armará el equipo argentino?
Creo que la serie con la Argentina va a ser uno de esos momentos que siempre vamos a recordar. En el ámbito tenístico sin duda va a ser durísimo poder ganarles, pero creo que no imposible. Tenemos jugadores con gran nivel tenístico que van a jugar sin nada que perder, y en el dobles creo que estamos muy parejos con los argentinos. Seguramente va a haber un duelo de hinchadas que espero sea sano y haga el espectáculo más emocionante. En el equipo argentino pensamos que va a jugar Schwartzman y después ustedes tienen muchas opciones para jugar los singles así que es difícil anticiparse.
En cuanto a Nicolás Massú como capitán de Copa Davis, ¿cuál es tu relación? ¿Qué aportes y consejos te dio?
Massú es un gran capitán, somos grandes amigos, y es muy grato ver toda la entrega que el da en cada Copa Davis, en cada partido y en cada punto. Su aporte más importante es que nos inculca que nunca debemos dejar de luchar, que cada punto vale, y que lo único que nos pide es que dejemos todo en la cancha ya que el resultado no se puede controlar.
Sos presidente de la Fundación “Futuros para el tenis”, contanos cómo fue que te uniste y cuál es el objetivo de la misma.
Antes de ser fundación existía un taller de tenis en la población de Santa Adriana en Santiago, al escuchar sobre esto me entusiasmé mucho por poder aportar un grano de arena y una de mis primeras actividades fue convertirnos en fundación reconocida por el Estado.
El objetivo es darle deporte y educación a niños en vulnerabilidad y riesgo social. La población en la cual se encuentra nuestra Fundación es muy peligrosa y ha estado en los rankings más altos de criminalidad en Chile. Nosotros hemos podido ayudar a revertir los niveles de crimen en la comuna gracias a esta iniciativa. Buscamos principalmente fomentar y masificar un modelo educativo basado en la educación valórica y para ello nuestra Fundación está desarrollando un interesante proyecto para entregar principios como el compañerismo, honestidad, contribución, respeto y autonomía no sólo dentro de una cancha sino también fuera de los límites de ella. En este momento tenemos más de 200 niños y estamos en una campaña para convertirnos en una fundación autosustentable, optamos por un camino de buscar micro donantes para no depender del Estado o de privados que en cualquier momento podría cortar sus aportes y nos deja varados. En cambio, si un donante nos deja de ayudar en este momento no es tan grave ya que cada persona solo dona en promedio 20 dólares mensuales.
Hace tan solo unos meses la ATP les hizo un aporte millonario a través de ATP ACES por la Caridad. ¿Cómo se enteraron y por qué eligieron la Fundación?
Uno tiene que aplicar para “Aces for Charity”, un programa de la ATP que apoya fundaciones de gente relacionada al tenis. Yo preparé un documento con toda la información que pude recabar y me dediqué por un mes a hacer una aplicación que fuese muy profesional, ya que sabía que son más de 60 personas e instituciones las que postulan y solo diez se ganan un apoyo.
Es un orgullo muy grande para mí haber podido gestionar este apoyo y haber ganado ese aporte económico que realmente nos ayuda a sobremanera a nuestra causa.
¿Cuál creés que son tus fortalezas y qué es lo que deberías mejorar?
Creo que es una pregunta muy difícil para un tenista ya que siempre queremos mejorar todo o sentimos que podríamos mejorar en todos los ámbitos. Pero siendo un poco más específico, me gustaría seguir mejorando en las devoluciones, saque y juego de red principalmente.
¿Cuáles son los pros y los contras de jugar al tenis de manera profesional?
Creo que la respuesta es muy simple y en realidad es para cada trabajo que uno haga. Si lo amás entonces hay muy pocos contras, si lo odiás entonces no tiene sentido que lo hagas, la vida es muy corta para perder el tiempo.
Si pudieras armar tu jugador ideal, ¿cuál sería?
Federer con el saque de Karlovic.
Alguna anécdota que nos puedas contar…
Jugar un partido de fútbol cuando estuvimos en Nigeria contra los nigerianos. Nigeria versus el resto del mundo, los tenistas armamos un equipo y les fuimos a jugar, pero cuando llegamos era una cancha de tierra y asfalto y nos dimos cuenta que ellos jugaban completamente descalzos. Pensamos que sería imposible que pudieran jugar pero no fue ningún problema: se deslizaban, corrían, hacían todo normal, fue un momento único de unión entre dos culturas completamente diferentes.
Para terminar, describite en tres palabras.
Trabajador, simpático y humilde.
FUENTE: eltenisquenovemos.com.ar