Es fácil pegarle bien a una pelota.
Eso lo puede hacer cualquiera, porque el hecho que la bola caiga dentro de la cancha, con una buena velocidad, no significa necesariamente que ese tiro haya sido ejecutado de manera adecuada en el aspecto táctico.
Para mí, jugar bien tenis es otra cosa.
Jugar bien tenis es elegir el golpe correcto, para cada situación que se presenta en el transcurso de un partido.
Es decir, hay que entender el juego, descifrando lo que pide cada jugada.
Para jugar bien tenis, hay que permanecer concentrado todo el match, sin baches, y pensar.
Pensar bastante.
Además, se debe pensar rápido, para leer la trayectoria de la pelota enviada por el oponente, con el fin de conocer su dirección, velocidad, efecto, altura, profundidad y peso.
Luego, el jugador tiene que decidir qué hará con esa bola, qué dirección, velocidad, efecto, altura, profundidad y peso le imprimirá, con el propósito de incomodar al rival y no ser incomodado por sus tiros.
El cerebro debe procesar todas las variantes mencionadas y transformarlas en determinaciones en unos pocos segundos, bajo presión, cansancio y, a veces, un calor sofocante y público en las tribunas.
Para jugar bien tenis, se requiere un control avanzado sobre la mente y el cuerpo.
Así que jugar bien tenis, no es tan fácil como algunos creen.
Arturo Núñez del Prado / Profesor de Tenis / Periodista / arturondp@gmail.com