Un día Rodrigo, llevó a su hijo Laslo en Berlín a practicar tenisy desde ahí su relación con este deporte fue inseparable. Hoy a sus 27 años puede decir que ha ido creciendo como jugador y los resultados dan asidero a esta hipótesis: actualmente se ha posicionado como el quinto mejor jugador chileno en el ranking ATP, llegando al puesto 580.
Su evolución ha sido constante, hace un año estaba cerca del casillero 1.100 del ranking y ahora está cerca de llegar a su meta proyectada para este año que es lograr ingresar al grupo de los 500 mejores del orbe. Incluso en los últimos meses logró su primer título profesional (Cairo) y consiguió su mejor triunfo ante el 191 ATP, Germain Gigounon.
De hecho hoy, Urrutia tuvo una exitosa jornada en el Futuro 3 de Rumania, torneo en el que salió victorioso en singles y dobles: En su primer encuentro del día, Urrutia derrotó por parciales de 6-3 y 6-4 al alemán Christian Hirschmueller, avanzando a octavos de final del torneo y más tarde, el tenista nacional y el búlgaro Alexander Lazov se impusieron por 6-2 y 6-4 a los locales Ioan Abrudan y Eugen Durnescu, timbrando su paso a cuartos de final de dobles.
¿Cuáles son tus características como jugador, tus mejores golpes, fortalezas, debilidades?
“Mi mejor golpe es la derecha; en cuanto a fortaleza, la velocidad de piernas y las debilidades son la irregularidad durante un partido y el servicio”.
¿Cómo es el tenis en Alemania en particular y en Europa en general?
“En Alemania tenis está dentro los deportes favoritos, pero no tiene mucha presencia a nivel mediático, por otro lado los clubes de tenis son un centro de socializar y no sólo para jugar, además hay muchos torneos para niños y también para adultos (de todos niveles). Si lo llevamos a la realidad europea, la diferencia que se puede apreciar con la realidad a nivel Sudamericano por ejemplo, es el dinero, lo que permite el desarrollo de torneos de elite y junto con ello, el hecho de que varios países tienen el sistema de interclubes que permiten desarrollar un jugador desde chico”.
¿Cuál ha sido hasta ahora tu torneo preferido y por qué?
“Destaco el futuro en Überlingen (Alemania) porque las canchas están al lado del lago y el ambiente es muy lindo. Los socios del club hacen un tremendo esfuerzo para organizar el torneo”.
¿Qué torneo te gustaría jugar, contra quién y en qué fase?
“Me gustaría jugar en Roland Garros contra guga Kuerten en su mejor momento o en el Abierto de Australia contra Hewitt”.
Jugador de tenis preferido ¿por qué?
“Michael Chang, porque es muy tranquilo y atlético y Juan Carlos Ferrero, porque tiene lindos golpes y buena actitud”.
¿Si tuvieras que armar al jugador perfecto sacando lo mejor de uno u otro cómo sería?
“Revés de Nalbandian, dropshoty revés de Djokovic, derecha de Federer, devolución de Agassi y servicio de Sampras”.
¿Ves mucho tenis?
“Si, me gusta mucho ver tenis, siempre me compro el Eurosport Player para ver los partidos de los Grand Slams”.
Alguna ciudad que te haya gustado ¿Por qué?
“Kish Island (Irán), porque la isla es tranquilla y la playa es hermosa y Porto (Portugal), debido a que la ciudad es muy autentica y la comida es excelente. También la gente es muy amable”.
¿Qué podrías decirme respecto a tu rutina en materia de competencia, los calendarios, la presión de competir?
“Ahora con 27 años termino mi primer año jugando todo el año como profesional, debo reconocer que no tengo mucha experiencia en la planificación de los torneos, porque antes sólo jugué máximo 10 futuros al año”.
¿Cómo lo tomas? ¿Es algo que te perturba, puedes convivir con ello o te da lo mismo? ¿Qué mensaje le darías a aquellos tenistas que reclaman por la alta exigencia del calendario?
“Creo que la presión es algo que ocurre durante un partido y todos tienen que manejarlo, debo señalar que me siento muy afortunado de viajar y competir. No siento la presión de mostrar títulos, sé que estoy entrenando duro y dejando todo en la cancha”.
¿Cómo prefieres planificar el año: con sobrecarga en el calendario para agarrar ritmo, dosificando o buscando la conveniencia económica?
“Estoy buscando torneos que están cerca geográficamente hablando, pero también quiero ver nuevos lugares y culturas. Los resultados de los torneos también dirigen la planificación”.
Has tenido una evolución desde Interclubes hasta otro tipo de torneos a nivel profesional: háblanos de tu historia en este tipo de torneos y la etapa de transición…tienes anécdotas, historias que te guste compartir con nosotros…
“En el año 2015 sólo perdí un partido para mí club y gane 3 torneos nacionales. Me sorprendí porque yo fue más un entrenador que hizo 30 horas de clases en la semana que un tenista profesional”.
Has tenido un gran año 2017, háblame de lo que ha sido, lo que ha significado y las mejoras que has introducido a diferencia de temporadas anteriores…
“Hay que decir que hetenido un buen fin del año 2016. En 2017 sólo llegue a dos cuartos, pero siento que no baje mi nivel y estoy buscando jugar más constante y regularmente durante un año”.
¿Qué opinas del tenis chileno?
“Estoy viendo los partidos de Jarry y Garín en los challengers y me gusta mucho como juegan. No puedo seguir a todos jugadores, pero creo que el tenis chileno tiene sus promesas para llegar y jugar en la elite”.
¿Qué podrías comentarme respecto a lo que significa el hecho de generar recursos, búsqueda de auspiciadores, apoyo de los mismos y lo complejo que resulta golpear puertas buscando apoyo para un tenista…cuántas puertas golpeaste y qué respuestas recibiste?
“Siempre traté de buscar auspiciadores para raquetas y cuerdas, es difícil encontrar apoyo para esas cosas. Recién me compre dos raquetas de un alumno mío que tiene las mismas raquetas que yo. Sin la ayuda de mi padre y los interclubes no podría viajar un año entero”.
Proyectos para 2017 (hoy has llegado alrededor del casillero 500)…
“Quiero clasificarme para un challenger y subir mi nivel, el ranking va a responder cuando esté jugando más regular”.
¿Cuáles son tus pretensiones a futuro, ya sea dentro o fuera del tenis?
“Quiero subir mi ranking y mejorar en cancha dura y fuera del tenis, quiero ser un buen padre para mi hijo(3 años)”.
Por: Rodrigo Sánchez