Se esperaba que David Ferrer ganara con facilidad en la primera ronda del ATP de Río de Janeiro. El español, campeón vigente del torneo y número 6 del orbe, tenía enfrente al chileno Nicolás Jarry, 493° de la ATP, que había llegado hasta tierras brasileñas gracias a una wild car. Un rival menor, en el papel.
No pasó mucho tiempo para que Ferrer quebrara y se pusiera 3-1 en el primer set. Era el inicio de la debacle para Jarry, pensaron algunos, pero aún quedaba mucho por decir.Mostrando un muy buen juego y el desparpajo propio de un irreverente le devolvió el break a Ferrer de inmediato para igualar el marcador. Se fueron punto a punto, palo a palo. Nadie que viera el partido hubiera pensado que jugaban un top ten y un tipo que está a la cola del ranking mundial.
El español se notaba incómodo, se tenía que exigir en cada pelota para no sucumbir ante la energía de Jarry. Recién al final, logró otro quiebre y se quedó con la manga por 6-3.
En el segundo set, Ferrer volvió a romper el servicio del chileno para ponerse 2-1. Ahí fue cuando apareció lo mejor de Jarry. Le robó el saque en dos juegos consecutivos, dejándolo en cero. Era el peor momento del español en la arcilla carioca. Un desconocido lo estaba poniendo de rodillas.
Con un 5-3 arriba, Jarry sirvió para llevarse la manga. Ya a las puertas de la victoria, el chileno, de sólo 20 años, sintió la presión y comenzó a flaquear.
Fue incapaz de mantener su saque ante Ferrer en el momento decisivo. Pero no fue la única oportunidad que tuvo el nieto de Jaime Fillol para quedarse con el parcial. En el juego siguiente tuvo triple punto de set, pero Ferrer ganó cinco puntos seguidos e igualó el tanteador. Jarry ganó el siguiente game y tuvo nuevamente dos puntos para llevarse la manga, pero el español sacó lo mejor de su juego para volver de las sombras. Fueron al tie break y ahí Ferrer hizo pesar sus galones para llevarse el partido.
Ferrer fue explícito: “Lo pasé mal, fue un partido duro”. Y añadió: “Tengo que mejorar en todo. He estado bien mentalmente, es lo único que valoro. No me he sentido cómodo en ningún momento en el partido, porque Jarry ha jugado bien, ha sacado muy bien y me lo ha puesto difícil”.
Jarry, , valoró su actuación: “Me sentí muy bien, fue uno de los partidos en que más ordenado he jugado. Estoy muy contento con la forma en que competí , la actitud que tuve y, sobre todo, porque me demostré que puedo jugar de igual a igual contra uno de los mejores jugadores de arcilla de la historia”.
Parecía un paseo militar y sin embargo Río asistió a un reñido partido de tenis. El invitado Jarry le hizo sufrir al cabeza de serie número dos. Resistió de pie durante una hora y 43 minutos.
Fuente: Diario La Tercera