Pese a que el tenista chileno Christian Garín perdió ante el colombiano Santiago Giraldo el pasado 9 de abril por la final de la Zona Americana I de Copa Davis, resultado que dejó a la escuadra nacional sin la opción de disputar el repechaje al Grupo Mundial, los comentarios sobre el nivel que mostró el iquiqueño en Medellín fueron más que positivos.
El propio Giraldo fue claro en señalar que “es un jugador con una potencia notable y un tenis bastante efectivo que tiene todo para llegar muy alto en el circuito”.
En tanto, el capitán del elenco cafetalero, Pablo González, no dudó en manifestar que “es uno de tenistas jóvenes de Sudamérica con más futuro. Tiene un tenis de mucha fuerza, pero también con bastante técnica”.
Sin embargo, a sus 20 años y 190° de la ATP (187° es su mejor ranking), existe un condicionante en el actual número uno de Chile que lo ha frenado para dar el salto a la elite del tenis mundial: “Controlar la presión y los nervios en partidos decisivos”, así por lo menos lo creen los ex tenistas nacionales de Copa Davis Gabriel Silberstein, Paul Capdeville y Sergio Cortes, quienes hace algunos días señalaron a Emol que Garín “tiene un gran futuro, pero sólo depende de él para desarrollarlo”.
El mismo futuro que tuvieron los ya retirados Marcelo Ríos, Fernando Gónzález y Nicolás Massú, quienes a los 20 años gozaron de un mejor momento en el circuito de la ATP que la primera raqueta del país.
A la edad de Garín, el “Chino” era el jugador 11° del planeta y ya sumaba cuatro títulos, todos de la categoría ATP, mientras que el nacido en Iquique, sin contabilizar los futuros, sólo registra la corona del Challenger de Lima, en octubre de 2016, además del título en Roland Garros Juniors en 2013 y el Mundial Juniors de 2010.
Ríos, antes del 23 de diciembre de 1996 había levantado el trofeo en el torneo de Bologna, Amsterdam, Kuala Lumpur y el ATP de St. Poelten.
Por su parte, González, el pasado 23 de julio de 2001, ocupaba el casillero 147° del mundo y se había coronado campeón del ATP de Orlando, en mayo de 2000, al derrotar a Massú por 6-2 y 6-3.
Además, ya el 2001 el “Bombardero de La Reina” había competido en el cuadro de singles del Abierto de Australia y Roland Garros, algo que aún no logra vivir Garín.
En tanto, a los 20 años Massú no sumaba ningún título de challengers, ni ATP, pero era el tenista 74° del orbe.
También el viñamarino registraba partidos en los cuatro Grand Slam del circuito y segunda ronda en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
Son los momentos que vivieron con menos de 21 años Ríos, González y Massú en la ATP, y que hoy Garín espera comenzar a cumplir más temprano que tarde, para así consolidarse como el “gran tenista” que muchos ya vislumbran.
Fuente: Diario El Mercurio