Veo jugadores que juegan como les gusta, no como les conviene.
Arman su juego de acuerdo a su gusto, no de acuerdo a sus características técnicas, ni envergadura física.
Hace poco, en un torneo profesional, vi a un tenista de baja estatura y físico menudo, que pretendía rivalizar en potencia con un jugador que era quince centímetros más alto que él, y le llevaba diez kilos de peso.
¿Qué pasó?
Fue desbordado de manera reiterada, tras los primeros golpes del peloteo, en cada punto.
Ese jugador, de acuerdo a sus características, debiera saber que casi nunca se impondrá en duelos de potencia.
Más bien, debiera usar mucho el slice para sacarle velocidad al peloteo y no ser desbordado; variar velocidades y alturas de pelota; entrar a la red, y tirar drops shots como lo hacen bastantes jugadores de la escuela francesa, que no cuentan con grandes tiros, ni una envergadura física exhuberante.
Cada jugador debe conocerse, ser realista y armar su juego para maximizar sus posibilidades de ganar, no para darse gustos y perder.
Porque a nadie le gusta perder.
Un segundo aspecto táctico esencial, es saber detectar las fisuras no evidentes del adversario.
Aunque parezca un contrasentido, cuando un boxeador es más vulnerable, es cuando ataca, cuando lanza un golpe, porque se descubre.
La mano que lanza el golpe deja un espacio en su rostro, donde puede ser alcanzado por el golpe de su oponente.
En el tenis sucede algo similar.
Cuando más vulnerable es el jugador, es cuando ataca.
Si les imprime potencia a sus tiros, los de su rival volverán rápido y tendrá menos tiempo.
Si se invierte, deja mucha cancha descubierta
Si saca un primer servicio con mucha potencia, queda muy metido dentro de la cancha, por la transferencia del peso del cuerpo hacia adelante.
Si entra a la red a cerrar el punto, queda expuesto al passing del contrincante.
Son riesgos que hay que correr, cuando se ataca.
Como queda de manifiesto, cuando un tenista ataca se producen grietas, fisuras, por lo que un buen jugador tiene que detectarlas y contragolpear, para explotar esas debilidades que se originan de forma involuntaria al desplegar un tenis ofensivo.
Arturo Núñez del Prado / Profesor de Tenis / Periodista / arturondp@gmail.com