Según el diccionario mapudungun Manao significa “adorno del guerrero”. Esto, calzó a la perfección con la descripción de Luis Felipe Contreras no sólo en su vida como deportista, sino también como una ideología de vida, una premisa bajo la cual condicionaba su actuar a la hora de entrar a la cancha.
Pese a que le gustaba el fútbol, Contreras llegó al tenis casi de manera fortuita: en el Club Eladio Rojas de Ñuñoa, pisó por primera vez una cancha de tenis como pasapelotas, para financiar lo que para él era su pasión -en ese entonces el balompié-. “Estuve como pasador un par de meses y me enseñaron a jugar; desde ahí empecé a jugar de sparring, cuando faltaba algún jugador y de a poco me salió fácil aprenderlo y como me vieron motivado, mis papas decidieron inscribirme a la escuela de tenis”, recuerda.
Empezó tardíamente, a los 14 años, pero su adaptación fue sorprendentemente rápida y logró nivelarse con otros jugadores de su edad, con una base más sólida, forjada producto de un desarrollo sostenido y permanente en el tiempo. “Fue fácil comenzar, a los 15 y 16 años no me fue muy bien y el salto lo di en menores de 18. Evidentemente di mucha ventaja, no estaba entre los primeros, pero el tenis me cautivó porque como deporte depende solamente de lo que uno haga”, señaló Contreras.
Nuestro entrevistado rememora con cariño a sus primer profesores, Maximiliano Viveros, Manuel Miranda y hace una mención especial a Enrique Álvarez en el Estadio Nacional y Robinson Gamonal. Seguimos metidos en la máquina del tiempo y Contreras atesora su primera raqueta de aluminio y los primeros derechazos con su raqueta de madera, la cual terminó rompiendo mientras jugaba en la calle con sus amigos.
Admiró a André Agassi, de hecho, su sobrino que también está iniciando un exitoso camino en el tenis se llama Benjamín André Barquín Contreras. A nivel jugador se describe como “defensivo, me gustaba correr harto, disfrutaba defendiéndome y contratacando cuando podía, mi juego lo basaba más en la derecha, pero amaba los partidos largos”. Entre sus rivales, guarda en la retina a su bestia negra, Carlos “Charly” González el cual le ganó cada vez que se enfrentaron, también se le viene a la mente su mejor amigo, David Véliz, con quien compartió experiencias inolvidables en Interclubes en Europa.
Precisamente en Europa inició un nuevo camino: profesor de tenis Alemania y Francia, donde ejerció por 5 años, esa labor lo fue empujando al retiro de este deporte y además de modo simbólico, logró su primer y único punto ATP (Ranking en ese entonces 1505), meta que le trae satisfacción en el sentido de que, “al sacar un punto aparecería en el registro. Esto fue en 2010 en un futuro en el Sport Francés, tras perder en segunda ronda contra Pablo Galdon.
“Ya no compito hace como 3 años, la competencia me aburrió un poco. Sentía que ya no me salían las cosas como antes y deje de viajar, porque empezó a jugar mi sobrino y me dedique a entrenarlo en el Club de Tenis Chicureo en el que llevo ya 10 años”, afirmó.
Este antecedente además, por esas cosas del destino, llevó a Contreras hace 3 años a iniciar su emprendimiento en indumentaria deportiva: Manao, es el nombre escogido para esta nueva marca que tiene a disposición de los amantes del tenis y otras disciplinas, polerones, buzos, calcetas, gorros y otro tipo de indumentaria. “Llegué a este emprendimiento porque me gusta invertir el dinero que voy ganando, porque la profesión de profesor de tenis de clases particulares es muy variable, puedes tener meses muy buenos como otros no tanto. Por ejemplo,en invierno por temas climáticos la demanda disminuye y hay que tomar los resguardos”.
En un principio, intentó con la creación de tazones publicitarios para empresas. No le fue muy bien y se enfocó con su madre Angélica Almonacid, quien tiene un taller en su casa de confecciones de ropa para colegios a crear esta marca y explorar este nicho de mercado, ella a nivel producción y Luis Felipe en temas de diseño, relación con proveedores y estampados con una máquina que ya adquirió.
A eso, debemos sumar que las grandes compañías están dejando de traer indumentaria deportiva de tenis. “A modo de referencia a mi sobrino que es de 12 años por un tema de talla, he debido traerle indumentaria desde el extranjero. Al tema del tallaje, debemos adicionar que los precios son muy elevados y poco convenientes”, complementa Contreras.
Es necesario destacar que la ropa cuenta con una tecnología especial, las telas de las camisetas son con tratamiento antitranspirante y antibacterial, certificadas por 3M con su respectiva etiqueta, que regula calidad y estándar del vestuario.
¿Cómo es el sistema de pedidos?
“Existe una tabla de tallas y se confeccionan según pedidos y en cuanto a diseños,Trabajamos con muchos colores nuevos. Si alguien quiere alguna combinación especial, también se puede ver esa opción”, concluye Contreras quien además piensa en grande, debido a la enorme demanda que ha tenido y proyecta en un futuro tener una tienda.
Por lo pronto, quienes estén interesados en conocer más de esta propuesta, pueden visitar:
Sitio web: www.manaosport.cl
Mail: felipe_con_alm@hotmail.cl
Facebook: Manao Sport
El Templo del Tenis: Apoquindo 6415 – Local 35 – Las Condes
¡Deseamos la mayor y mejor de las suertes a Luis Felipe Contreras en esta nueva aventura!
Por: Rodrigo Sánchez